martes, 5 de diciembre de 2006

Vamos al-coholegio


Autor: Roberto Peralta Fuente: Sí para Jóvenes


En casos graves de alcoholismo lo que se debe hacer es someter a la persona a tratamiento lo antes posible

Los efectos del alcohol en los jóvenes

Mucho es lo que se ha dicho de los terribles estragos que el excesivo consumo de bebidas alcohólicas ha provocado, tanto a la persona que lo ingiere como a quienes están más cercanas a él.


Son impresionantes las estadísticas mundiales sobre personas alcohólicas, los daños físicos originados por el alcohol, la cantidad de muertes provocadas por éste, así como el daño económico que causa, no únicamente para el bebedor, sino para la sociedad en general.


El significado social y personal que tiene la acción de ingerir alcohol, cambia de una sociedad a otra, pues mientras para unas es objeto de rechazo moral, para otras, como la nuestra, puede ser una forma de pensar y actuar muy relacionada con el machismo.


Se piensa que existen factores biológicos, psicológicos, familiares y sociales que contribuyen a que una persona sea alcohólica, pero no podría asegurarse que ninguno de estos elementos, por sí solo, sea la causa del alcoholismo. Existen incluso especialistas que consideran que no es una enfermedad, sino una posición ante la vida.



ANTECEDENTES

Los factores tóxicos del alcohol se conocen desde tiempos muy remotos; pocas son las culturas que no han recurrido al uso de bebidas alcohólicas para producir alteraciones en su estado de conciencia.


El aislamiento de una preparación fuerte de alcohol a través de la destilación fue lograda por primera vez por el persa Rhases, aproximadamente 800 años antes de nuestra era. El procedimiento consistía en hervir material fermentado, del que se desprendía un fino polvo invisible.


El árabe era la lengua oficial entonces, por lo que la frase para decir “el polvo”, era al kohl y de allí proviene la derivación “alcohol”. Los licores y bebidas espirituosas con alcohol destilado fueron introducidas en Europa hacia finales de la edad media.


En México, su uso se remite a la época prehispánica. El alcohol se ha relacionado con la vida religiosa, económica, social y política de los pueblos que habitaron nuestro país, así como con los cambios generados a través del tiempo en la sociedad mexicana.


Las bebidas tradicionales y las industrializadas coexisten en el México actual. El pulque, que estaba asociado a la mitología de los pueblos indígenas, se sigue consumiendo, especialmente en zonas rurales y se le atribuyen propiedades nutricionales y terapéuticas. Las bebidas industrializadas juegan un papel importante en la economía del país y son consumidas básicamente en las zonas urbanas.


PERO, ¿QUÉ ES EL ALCOHOLISMO?

Para la Organización Mundial de la Salud, un alcohólico se define como aquél que, bebiendo en exceso, muestra alteraciones mentales o corporales de sus relaciones interpersonales y un deterioro uniforme de su función social y económica.


El Comité de Alcohol y el Adolescente, de la Junior League de México, define al alcoholismo como una “enfermedad crónica y progresiva en la cual el beber produce efectos adversos a la salud, la familia y la vida social, el trabajo o la escuela y puede conllevar problemas legales. El alcoholismo no respeta edad, sexo, creencia o posición social”.


PROBLEMÁTICA GENERAL

En nuestros días, el alcohol tiene un fuerte impacto sobre la salud pública. Es responsable de una alta tasa de muertes por cirrosis hepática, accidentes de tránsito, lesiones por riña, ausentismo laboral y desarmonía familiar.


En México, el alcoholismo ocupa actualmente el segundo lugar de los problemas más importantes de salud mental, por lo que se trata de un problema prioritario de salud pública.


ADOLESCENCIA Y ALCOHOL... UNA AMISTAD NOCIVA

La adolescencia es por definición un periodo de transición entre la niñez y la adultez, es el tiempo del desarrollo sexual, de los cambios sociales, ideológicos, psicológicos; es la época de la toma de decisión vocacional y cuando se pugna por la independencia; es el momento de establecer la identidad propia, de la rebelión a lo establecido, a la adquisición personal de valores.


Sin embargo, es cuando también existe la necesidad de pertenecer a un grupo que ayude al joven a encontrar su lugar dentro del contexto social.


El adolescente puede buscar la identificación con otros jóvenes a través de estereotipos que aplica a sí mismo, a sus ideales y a sus adversarios, pues en esta etapa la imagen corporal es muy importante.


Una forma de sentirse identificado y dentro de un grupo es a través del alcohol, bebiendo en fiestas y reuniones sociales, aumentando así el sentido de pertenencia, uno de los aspectos más importantes en la vida del joven.


La primera experiencia de alcohol se da entre los 10 y 13 años, casi siempre en la casa y por causas justificadas: al festejar un evento especial como la Navidad, Año Nuevo o algún cumpleaños. Esta primera vez casi nunca es cuestionada por la familia ni por la escuela.


Así, los adolescentes se convierten en un grupo altamente propenso al alcoholismo, no porque existan muchos jóvenes alcohólicos, sino porque es en esta etapa donde se adquieren las costumbres inapropiadas para el consumo de alcohol.


La edad promedio en la que se empieza a ingerir alcohol en nuestro país es cada vez menor. Mientras en la década de los 70 era a los 15 años, en 1995 fue a los 12. Actualmente un número mayor de jóvenes lo consume sin ser considerados alcohólicos.


A medida que el joven se va distanciando del seno familiar, la influencia del grupo puede aumentar. Ya no busca sólo al grupo de amigos del barrio, ahora puede juntarse con grupos de otras escuelas y vecindarios, que se reúnen para darse apoyo. Se buscan amigos no únicamente para tener compañía agradable, sino también para compararse con ellos.


Para los adolescentes, empezar a beber es importante, pues casi siempre asocian este acto con la aceptación social. Lo hacen principalmente por gusto, para ser como los otros y para festejar ocasiones especiales.


Consideran al alcohol como una bebida social, y piensan más en lo que hace por ellos que en lo que les hace a ellos.


Los adolescentes frecuentemente piensan que los adultos beben por sus problemas, por sus inconvenientes y ansiedades, pero no creen que ellos puedan caer en lo mismo.


¿QUÉ BUSCA EL JOVEN EN EL ALCOHOL?



  • Aumento de la confianza en sí mismos.


  • Vencimiento de la timidez o angustia ante una cita o compromiso formal.


  • Mejorar la disposición al trabajo.


  • Disminuir el sentimiento de soledad.


  • Evadir responsabilidades agobiantes.


  • Aumentar el sentimiento de aceptación.

PERSONALIDAD DEL ALCOHÓLICO


Existe consenso al considerar a la depresión como una de las causas más determinantes para el alcoholismo. Aproximadamente, 60% de los alcohólicos la presentan en una o más ocasiones.


Un alcohólico puede sentirse deprimido por su forma de beber y puede beber por sentirse deprimido.


El alcoholismo se asocia con ansiedades crónicas, sentimientos de inferioridad y tendencias a autocompadecerse.


Diversos estudios señalan que los alcohólicos presentan:




  • Debilidad en su autoestima.


  • Baja tolerancia a la frustración.


  • Impulsividad, pasividad y dependencia.


  • Sentimientos de omnipotencia (complejo de inferioridad).


  • Exhibicionismo y baja capacidad de reflexión.

De acuerdo con estudios clínicos, puede decirse que existen varios tipos de alcohólico, pues las personalidades y rasgos psicopatológicos difieren ampliamente, tanto en etapas iniciales o avanzadas como en las necesidades individuales de inicio, mantenimiento y terminación del tratamiento.



LO QUE DEJA EL ALCOHOLISMO


Un alcohólico es aquella persona adicta al alcohol, que depende del mismo y es incapaz de elegir entre consumirlo o dejar de hacerlo, permitiendo así que el alcohol tenga un control sobre la persona.


Generalmente se cree que un alcohólico es aquel que vive en la calle, pero sólo 3 o 5% vive en condiciones precarias. La mayoría está desempeñando las más diversas actividades productivas.


La clave del alcoholismo no está en la cantidad ni en la frecuencia con que se bebe, sino en la pérdida del control para hacerlo: el alcohólico depende del alcohol.


El alcohol tiene un fuerte impacto sobre la salud pública. Es responsable de una alta tasa de muertes por cirrosis hepáticas (actualmente existen más de cuatro millones de alcohólicos en México). Esta enfermedad está considerada entre las primeras de 10 causas de muerte de la población en general.


La cirrosis hepática, en su última etapa, es muy severa. El hígado se degenera, se hace pequeño, perdiendo su capacidad funcional. Esta enfermedad es incurable y mortal, la persona sufre una deplorable calidad de vida y va muriendo poco a poco.


Si la población se redujera a hombres entre 40 y 59 años de edad, la cirrosis hepática ocuparía el primer lugar en mortandad.



SI LAS CONSECUENCIAS SON TERRIBLES, ENTONCES... ¿SE PUEDE HACER ALGO?


En casos graves de alcoholismo lo que se debe hacer es someter a la persona a tratamiento lo antes posible para evitar que el mal progrese.


A las personas que aún no han cruzado la barrera del abuso (bebedores sociales), se les debe informar de los riesgos para prevenirlos.


También es importante procurar una educación que incluya el desarrollo de una responsabilidad de la propia salud, así como un cambio de actitud hacia las bebidas que contienen alcohol.


La prevención se debe dirigir principalmente a niños y adolescentes que son víctimas fáciles del alcoholismo, sin descuidar a la sociedad en general.


Las influencias más determinantes en la educación de los adolescentes, en orden de importancia, son: los amigos, la familia, la escuela, los medios de información y la literatura.


La escuela puede convertirse, por ser una institución educativa, en un medio muy importante para la prevención del alcoholismo.


Sin embargo, los colegios son un apoyo para involucrar a la sociedad en general, empezando por la familia. Deben llamar nuevamente a los padres a sus espacios educativos, con la finalidad de lograr acuerdos y elaborar programas especiales de intervención que complementen las medidas oficiales de prevención y tratamiento.


Entonces sí, en conjunto, la sociedad empezaría a luchar con mayor fuerza, y quién sabe... quizá se gane la batalla.



EFECTOS DEL ALCOHOL




  • Pérdida de la inhibición.


  • Debilitamiento del juicio.


  • Relajamiento físico y sueño.


  • Depresión de los sentidos.


  • Reducción de los reflejos.


  • Mayor depresión de funciones cerebrales y nerviosas.


  • Lagunas mentales.


  • Habla pastosa o cortada.


FACTORES QUE VARÍAN LOS EFECTOS DEL ALCOHOL




  • Las personas de menor peso son más afectadas.


  • Los efectos son más fuertes en las mujeres que en los hombres.


  • La tolerancia (la capacidad con la que se nace para que el alcohol se metabolice) tiende a disminuir a medida que pasan los años.


  • El estado en el que se encuentra el hígado.


  • La cantidad de alcohol ingerido: a más alcohol, más efectos.


  • La rapidez con la que se toma: a mayor velocidad de ingestión, más intoxicación.


  • Tipo de bebida ingerido: algunas bebidas se absorben más rápidamente.


  • Presencia de alimento en el estómago: a más alimentos, menos efecto.


  • Condiciones orgánicas: una persona fatigada o enferma será más afectada.


  • Tolerancia alterada: Una persona requerirá cada vez mayor cantidad de alcohol para sentir sus efectos.


  • Características psicológicas: temor, tensión, ira, fatiga, etcétera.


CAUSAS POR LAS QUE LOS ADOLESCENTES BEBEN ALCOHOL




  • Heredan y aprenden de los adultos juicios, prejuicios y mitos sobre el consumo inadecuado de bebidas alcohólicas.


  • Existe un mensaje ambivalente sobre el alcohol y su componente mágico: los niños no beben alcohol, es malo; pero los adultos sí pueden hacerlo.


  • Se busca relajar las angustias propias de la adolescencia: necesidad de autonomía, identidad, pertenencia, búsqueda de valores, cuestionamientos de reglas y roles, temor al mundo adulto, despertar sexual.


  • Una situación familiar muy rígida puede fomentar que el joven se refugie en el alcohol para intentar encontrar su identidad.


  • La influencia social: la presión de los amigos y el consumo que los padres hacen de bebidas alcohólicas.


  • Buscar nuevas sensaciones y aumentar la tolerancia al alcohol.


  • Imitación o aprendizaje: los niños tienden a imitar la conducta de los bebedores, particularmente de los padres.


FASES DEL ALCOHOLISMO.


1. Prealcohólica:Se busca alivio ocasional a las tensiones y se crea un aumento de la tolerancia al alcohol.


2. Inicial o Prodómica:Amnesia, beber a escondidas, preocupación por conseguir bebidas alcohólicas, beber con avidez, sentimientos de culpa por la manera de beber, evitar hablar de alcohol, aumento en la frecuencia de lagunas mentales.


3. Crucial o Crítica:Pérdida de control, de racionalizaciones, neutralización de presiones sociales, comportamiento fanfarrón, conducta agresiva, remordimientos persistentes, período de abstinencia completa, alejamiento de amigos, renuncia a empleos, la bebida se convierte en el centro de las actividades, pérdida de intereses externos, cambio en la interpretación de las relaciones interpersonales, compasión por sí mismo, escape geográfico esconderse, fugarse), cambio en hábitos familiares, resentimientos, protección al abastecimiento de alcohol, desnutrición, primera hospitalización, disminución del apetito sexual, beber en ayunas.


4. Crónica o Terminal:Intoxicaciones prolongadas, deterioro moral, trastornos del pensamiento, psicosis alcohólica, beber sustancias que no sean alcoholes, fuerte deterioro de las relaciones sociales, disminución de tolerancia al alcohol, temores indefinidos, temblores persistentes, inhibición psicomotora (locura), racionalización fracasada, hospitalización definitiva y, finalmente, la pérdida de la vida.


Patologías más frecuentes asociadas con el abuso del alcohol




  • Hipertensión


  • Infartos cardiacos


  • Irritaciones gástricas e intestinales


  • Hepatitis alcohólicas


  • Pancreatitis alcohólica


  • Cirrosis hepática


  • Impotencia sexual, trastornos menstruales


  • Cuadros diarreicos y de mala absorción


  • Cardiomiopatías


  • Desnutrición y anemias


Mitos que pretenden justificar el consumo de alcohol




  • El alcohol es un alimento. Aunque las bebidas alcohólicas producen calorías, éstas se queman inmediatamente, no se almacenan y por tanto no son válidas como aporte energético.


  • El alcohol calienta. Lo que produce es una vasodilatación periférica, y como consecuencia enrojecimiento de la piel y mucosa, pero al calentarse la piel, se produce una disminución de la temperatura con enfriamiento del interior del cuerpo.


  • El alcohol es un estimulante del apetito. Lo único que provoca son secreciones gástricas con movimientos en las paredes de estomago similares a la sensación de hambre.


  • El alcohol es bueno para el corazón. Daña la musculatura cardiaca y además no es vaso dilatador coronario.


  • El alcohol es un estimulante. Produce desinhibición dando al sujeto la sensación de tener mas posibilidades. En realidad es un depresor del sistema nervioso.


  • El alcohol es un estimulante sexual. Desinhibe pudiendo despertar interés por el otro sexo, pero en realidad interfiere en el desarrollo de la relación sexual.


  • El alcohol elimina las barreras de comunicación y nos hace más amables. En muchos casos cuando se abusa del alcohol, puede aparecer agresividad, pasividad, melancolía, y baja capacidad de autocontrol.


Concentración de alcohol en la sangre en una persona de 75 kg. de peso, a la media hora de haberlo ingerido




  • 3 aperitivos - 0.94%• 1 lt de cerveza - 0.84%


  • 1/2 de champaña - 1.21%


  • 2 whiskies dobles - 1.03%


  • 1 lt de vino 12° - 0.99%


  • 2 copas de cognac - 1.02%


Ingestión de alcohol y efectos en el conductor


2 vasos de vino o 3 tarros de cerveza Alteración de la movilidad de los ojos, deterioro de la atención dividida, euforia.


1 copa de whisky Menor capacidad de juicio, dificultad en el seguimiento de los objetos. Incremento de somnolencia.


2 vermouths Empeoramiento de la capacidad de procesar información, alargamiento del tiempo de acción.


2 whiskies Alteración de las funciones visual y perceptiva. Respuestas muy lentas.


1 brandy y 2 whiskies Conducción anómala, aun en situaciones de tráfico normal.1 lt de vino y


1lt de cerveza Conducción difícil. Las funciones se deprimen y provoca propensión al riesgo vital.

No hay comentarios: